UN SUEÑO Y UN REECUENTRO

Todo el mundo, sin excepción, ha tenido un sueño, o varios sueños, en su infancia. Hay quien hemos querido ser bomberos, astronautas, médicos... O quizá hemos querido ser como nuestro héroe favorito que leemos asiduamente en los comics: aguerrido, valiente... A pesar de tener ese look tan raro:P. Estos sueños, por desgracia, se van diluyendo en el mar de la madurez, las responsabilidades y las preocupaciones. O tal vez, como McGiver, esos sueños consiguen sobrevivir a toda esa marea de madurez y, contracorriente, se aferran a un rinconcito de nuestra mente, agazapados, temerosos de que los "corchetes responsables", que están todo el día buscando cualquier rastro de infancia de nuestra mente para destruirlo, les encuentren. Y cuando todo es favorable, cuando encuentran un motivo o quizá, el dueño de esa mente tenga una visión de algo, salen a la luz e inflaman como una bomba de napalm la mente de su dueño con ese sueño de la infancia y, a veces, en contadas excepciones, se puede hacer realidad.

Por otro lado están los recuerdos de nuestra infancia, momentos gratos y no tan gratos, de aquellos momentos que tuvimos la suerte de vivir y que, por desgracia, estas generaciones no se molestan ni en experimentar. Sólo cuando pasa el tiempo llegamos a valorar, en su justa medida y con una tremenda añoranza, aquellas experiencias que tenemos almacenadas en este disco duro de tremendísima capacidad que tenemos por mente. Lo que pasa es que están ahí almacenados, en un lugar oscuro de nuestra biblioteca, llenos de polvo, acostumbrados a su olvido. Pero, como suele pasar más de una vez, hay algo, un acontecimiento o una sucesión de recuerdos encadenados, que hacen que salgan a la luz, entornando los ojos por estar acostumbrados a la oscuridad y sorprendidos de que alguien se "acuerde" de ellos. Y el súmmum de todo sería si, gracias a ese catalizador que ha hecho que salgan a relucir, el recuerdo se reencuentre con aquello que en la infancia nos hacía tan grato servicio y compañía.

Este ha sido mi sueño hecho realidad:



Y este ha sido mi "reencuentro":